Entrevista a Javier Totorikagüena, de Bilba, sobre las ventajas para las empresas de construcción

Nuestro Ingeniero Javier Rabadán continúa su serie de entrevistas a pie de obra. En esta ocasión, nos hemos desplazado a The View Marbella, uno de los proyectos más importantes de Sismo Spain en la actualidad. Allí, Javier entrevista a Javier Totorikagüena, jefe de Producción de Bilba, la constructora encargada del proyecto. Ambos comentan las principales ventajas que aporta Sismo Spain a las empresas de construcción, y en concreto, a esta promoción, para la que desde nuestra fábrica se han producido 20.900 metros cuadrados de forjados y 9.300 metros cuadrados de paneles Sismo destinados a muros de cerramiento y separación de viviendas.

Para la constructora «el sistema Sismo nos permite un ahorro en tiempo, en limpieza de obra y a nivel económico»

(Trascripción de la entrevista)

Javier Rabadán: Estamos aquí, en la obra de The View de 49 apartamentos en Benahavís. Hoy en concreto estamos en el bloque 7, que tiene la peculiaridad de ser redondo. Vamos a hablar con Javier Totorikagüena, que es el jefe de producción de Bilba, la constructora que está realizando la ejecución completa de las viviendas. Javier, como jefe de producción, ¿qué ventajas podrías comentarnos del sistema Sismo?

Javier Totorikagüena: A nivel de una obra como esta, el sistema Sismo nos permite un ahorro en tiempo, en limpieza de obra y a nivel económico. El sistema, al ir subiendo la estructura con todo lo que es la fachada y tradicionalmente la capuchina, vamos subiendo forjado a forjado, de forma que tenemos la capuchina terminada. Básicamente ese es el ahorro fundamental que tiene cada planta, multiplicado por todas las plantas que tiene la obra… En este caso siete edificios de 3 o 4 plantas cada uno, es un ahorro importante.

Javier Rabadán: Otra de las cuestiones que podemos ver es la parte que sustituye Sismo que sería el cerramiento de capuchina, ¿qué supone eso a la hora de gestionar los equipos durante la ejecución de la obra?

Javier Totorikagüena: En una construcción tradicional de capuchina, necesitamos un suministro de ladrillo, un suministro de mezcla y una serie de materiales. Además, necesitamos un aislamiento que hay que ir poniéndolo por capas, y que con Sismo lo estamos colocando de una sola postura. Evidentemente es un ahorro de tiempo, de trasiego de gente y de materiales, que se agradece muchísimo en obras grandes.

«En este caso siete edificios de 3 o 4 plantas cada uno, es un ahorro importante»

Construcción más precisa y rápida, como ventaja añadida para las empresas de construcción

Javier Rabadán: Otra de las cuestiones a tener en cuenta, en concreto en un bloque como este, que tiene un diseño peculiar, es cómo influye Sismo tanto a la hora de la ejecución como a la hora de acabados y de precisión, sobre todo al hacer un bloque redondo que tiene una dificultad bastante grande con cualquier tipo de sistema.

Javier Totorikagüena: Sismo en este bloque particularmente circular lo que nos da es una curvatura mucho más precisa y más rápida, porque viene hecho, que un sistema tradicional. Ponemos paneles de 1,5 metros, y aproximadamente cuatro o cinco paneles los podemos poner en un plazo de 3 o 2 horas. En un sistema tradicional eso sería imposible. Además es un beneficio también a nivel de la perfección de la curva que no nos da otro sistema.

Javier Rabadán: Otro de los procesos más importes es la reducción de plazos con el sistema. En este caso, estamos hablando de siete bloques, de 3 y 4 plantas, de diferentes tipologías y formas. Una obra de 20.000 m2 de forjados. ¿Qué reducción de plazos ha supuesto en ella el uso de Sismo?

Javier Totorikagüena: Los plazos que tenemos por forjado se reducen casi a nivel de 2 o 3 semanas por forjado. Saca la cuenta de la cantidad de forjado que tenemos en una obra como esta… Evidentemente estamos hablando de meses de ahorro, con lo que conlleva respecto a los gastos indirectos y otras cuestiones en obras de este tipo. En obras más pequeñas entiendo que quizá sea un poco menor, pero también va a ser importante. Siempre hay una reducción de plazos, está comprobado que sí la hay.

Un sistema de fácil aprendizaje para constructoras

Javier Rabadán: Otra de las partes que hemos comentado antes es la formación de los equipos. En este caso Bilba ya había hecho muchos proyectos ejecutados con el sistema en diferentes zonas, pero ¿cómo influye eso en la ejecución o qué formación dais a los trabajadores para tener una buena preparación para el montaje del sistema?

Javier Totorikagüena: La formación que tiene el personal nuestro es buena en Sismo porque tienen todos ya una cantidad de obras encima importante. Lo que se ha visto también es que el que no la tiene es un sistema con facilidad de aprendizaje. Por ponerte un caso, en el primer forjado que hace un trabajador aprende los pequeños trucos que tiene el sistema en el montaje y solo se ve afectado en los primeros montajes. En las segundas plantas o segundos paneles de muros se nota que el avance es importante. Además, contamos con el apoyo de Sismo, siempre la formación o las dudas nos las resuelven sobre la marcha. No es un sistema difícil de montar respecto a lo que estamos acostumbrados.

Javier Rabadán: Otro de los temas a ver en ejecución de la obra es la limpieza o gestión de residuos. Como jefe de producción de la obra, ¿qué podrías comentarnos?

Javier Totorikagüena: Es un sistema bastante limpio, solo tiene un pequeño residuo del hormigón que se echa en el alma de Sismo, que se va limpiando con la planta. En un sistema tradicional todos sabemos lo que es el residuo del ladrillo, el residuo de la mezcla y demás elementos que nos generan una cantidad de contenedores y demás, que cuanto más grande la obra, peor es. Se puede decir que también es un sistema bastante limpio para lo que estamos habituados en obra.

Javier Rabadán: Como jefe de producción de una obra grande, ¿qué podrías recomendar a otras constructoras para que usaran Sismo si están pensando en incorporar un sistema con estas series de ventajas?

Javier Totorikagüena: Para otros compañeros yo recomendaría el sistema Sismo a nivel de lo que se ha estado hablando, que tiene un ahorro en plazos, que se traduce rápidamente en un ahorro económico. Eso es fundamental. Y después tiene el revestimiento que va sobre Sismo, se trabaja como un revestimiento habitual en una obra normal, o sea, que eso no cambia, por lo tanto, todo el ahorro está en el sistema del montaje y en el periodo que se monta. Entonces es recomendable 100%.

Tiene un ahorro en plazos que se traduce rápidamente en un ahorro económico.

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